EL HILO NEGRO COMO MI SUERTE

Que triste, es cuando pones tus sueños y esperanzas en algo, y te llegan con que es una bicoca de mierda, si. Una bicoca. Comencé a trabajar con muchas ganas, guardándome mis miedos, tratándome de adaptar a una nueva vida, eso de trabajar en casa pues no nada mas es difícil y mas si no tienes un plan, un horario que seguir. Aunque de naturaleza siempre he sido una persona desordenada, y un poco, no mas bien un mucho desmadrada, olvidadiza y descuidada. Pero siempre siguiendo mis corazonadas. Bueno, el caso es que ya estaba habituándome, cuando zas!!! Me llega la noticia que dice mi mama que siempre no, que me van a pagar menos, que si así le seguía o que. Que porque no calcularon presupuesto, que porque contrataron a otros diseñadores que por las arañas y las telarañas… y yo que había soñado anoche que pisaba un nido de un montón de serpientes. Y mira. Los sueños nunca engañan.

Y aquí estoy esperando a que me den el dinero de lo que trabaje para mandarlos de unas ves por todas a la…porra. Con la conciencia tranquila. Si me quedo seguiré trabajando mas de doce horas continuas, quebrándome la cabeza, estresándome, lastimándome los ojos y la espalda, si me voy así nomás no es justo porque me deben dinero mínimo por el trabajo que les he hecho. Y porque tengo miedo de mandarlos a la monda, y luego que voy a hacer. Por supuesto como buen sabio y observador y muy oportuno que es de la vida, Richi, me dijo lo siguiente: "Tu crees que es verdad que contrataron a otros aparte de ti"…? No…no se-le dije- Y pum como revelación me dijo: Solo te quisieron para que les ayudaras a terminar sus trabajos pendientes y ya no tienen los huevos suficientes como para decirte que ya no te quieren y listo. Fue un trabajo temporal. La sinceridad se antepone a la razón. Y me callo el 20, en efecto, fui de nuevo utilizada. Y pensé que no me volvería a pasar y caí de nuevo. Ya se, me oigo como una rola de Chabela Vargas y con ese sentimiento cantara si tuviera una botella de tequila encima. Y lloraría, lloraría el coraje que tengo dentro, las ganas de gritar, sin tener que taparme la boca con la almohada. Las ganas de mentarle la madre a todos y a todo a veces hasta al mismísimo Dios…pero el no tiene la culpa. Esta muy por arriba de estas pendejadas. Si, pendejadas, pendejada mía, por caer de nuevo. Pendejada de ellos por ser pendejos y punto.

Y ahora que me pongo a pensar y pensar, ¿Qué harías tu Fridita mía? ¿Qué hacías cuando Diego te dejaba como una piltrafa el corazón?…..Cada vez que estoy triste me acuerdo de pintar, y me entras una ganas bárbaras de hacerlo…no se porque no lo he hecho, a lo mejor ahí esta la clave de todo, el hilo negro…creo que ha llegado el tiempo de ponerme a hilar…no, en vano mi nombre deriva de "aracne"…