martes, 16 de marzo de 2010

VIAJE RETRO


Desde las 9 a.m, estoy conectada, al pendiente del Messenger, “trabajando” desde las 9 no he despegado un ojo de aquí, de la computadora, las horas han pasado tan lentas, e insulsas que me saben amargas. Nada, ni una señal, ni pío ni trabajo ni nada.
Yo se que la paciencia es un privilegio que se debe cultivar, bueno al menos Richi dice eso. Pero resulta que la mía tiene así como una deficiencia en la glándula de crecimiento porque la mía nomás no se desarrolla, aunque acá entre nos tampoco hago mucho para ejercitarla. Me dormí, dos horas y nada, esperando esperando siempre esperando, esperando lo mejor de las personas que conozco, de los trabajos que tomo, de que las desiciones que tomo no sean las equivocadas. Pero esperar me desespera.
Ayer en el trabajo de Richi, hicieron una carne asada, por el simple hecho de hacerla y celebrar que están juntos. Siempre se ha aspirado un ambiente armónico en su trabajo. Y lo envidio (de la buena eh?) Porque pocas veces experimente uno así. Bueno el caso es que platicando con una de sus compañeras, que estaba en la misma universidad que yo -salvo por unos añitos-compartíamos casi los mismos maestros sin contar con que algunos de mis compañeros de universidad fueron sus maestros. Cuantas historias, en los pasillos, y cuantos recuerdos., y me hizo pensar, ¿Qué fue de mi?. A donde quedo, la estudiante que era? Recuerdo que cuando hablaba de diseño se me llenaba la boca de burbujitas y se me enchinaba la piel, me apasionaba seguir diseñando y no me importaba hacerlo aunque me pagaran nada. ahora he notado que me he vuelto no un poco muy interesada, y espero redituar mi trabajo con un poco mas de dinero, Tampoco quiero millones y millones de dólares, pero bueno quizás estoy buscándole el lado equivocado a las cosas, a lo mejor no era mi destino el diseño grafico, quizás era otro tipo de diseño, de interiores de modas, industrial, de otra cosa. No se, igual es como cuando abres una caja con tus cosas antiguas y aun conservan el olor que tenían y se te vienen a la memoria muchas anécdotas y pensamientos. O ya estoy revieja o que se yo. Me saboreé aquellos años en los que luchaba contra toda idea que no se ajustara a mis sueños - ups, creo que aun lo hago- pero fue bueno, recordar anécdotas y maestros, aun nos reunimos, aun sabemos unos de otros en la universidad, ya no nos vemos tanto una ves al año o algo…pero nos mantenemos en contacto, nos procuramos y nos apapachamos cuando necesitamos, terminamos como una familia, nos une algo mas que ser “la generación conejillos de indias” , por ser la primera de la institución, nos une las historias, las lagrimas, las peleas, y sobre todo las risas. Y recordar lo que recordaba ha cambiado por lo menos mi sabor de boca… ¡que bien se siente!.

Solo espero de corazón, que todos nos parezcamos a lo que soñamos o mejor aun, seamos mejores de lo que esperábamos ser en esa época, y si alguno de nosotros no lo es, espero la neta, que pronto suceda. Por lo menos a mi me complace saber de ellos y saberlos bien.Al fin de cuentas, todos somos "Halcones" que no?

Papillón

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