Ya es cosa, rara cuando lo vez de otra perspectiva.
Cerca de mi, notando como respirabas, y como te emocionabas, cada nota, cada sonido, vibraba en un sentido redondo, como en un circulo donde yo era el emisor, la música, el conducto y tu el receptor. El perfume que usas, embriagante, el negro que te queda genial… la música, la música, la música!!.
No creo que haya sido al revés ya que a pesar de estar juntos, hay un graaaaaaaaaaaan hoyo en donde solo se cruza la tablita de las buenas costumbres, pero el abismo es tan grande…mi corazón lo siente. Y el corazón de pollo, rara vez se equivoca, sin embargo me divertí mucho,. De las 8 a las 12, la cena, las risas, la música, el cigarro y después, de las 12 el menaje a trois, de ligereza como el viento, me hizo reír, hasta llorar, (los humanos somos raros, lloramos cuando reímos, lloramos cuando sufrimos) pero aunque fue un menaje a trois, bizarre….me encanto. Ojala podamos volver a repetirnos. Ya te siento de mi.
Y además te cuento un secreto?…
Ya estoy en MI cuarto para regodearme con la vista y desnudarme, envuelta entre las vibraciones de la música, las imágenes de los ojos, y la memoria de mi nariz… y eso nadie, nadie nadie, lo va a evitar. Mis alas otra vez, se estiran hasta el techo y hasta el suelo, y me queda un recuerdo que es mas valioso, aparte de tu mirada, cuando te susurraba al oído, de vez en vez, ese instante en el que se detuvo el tiempo, que casi los dos rozamos la cara cerca, tan cerca que pude sentir en mi nariz, el “suishhhh” del roce del aire, y tus labios a pocos centímetros de mis ojos, ver tus manos, que me encantaron, y la emoción con que seguías la música, no se, que se me debía en destino, pero ayer, ayer lo recibí con cambio de mas….Papillón
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